10 REVISTA ANDA Relaciones Exteriores, Educación, Trabajo y Producción de México, Chile, Colombia y Perú, quienes, junto a empresarios, lideres de opinión jóvenes y el CEO de Nestlé para Latinoamérica, abordaron la problemática de empleabilidad juvenil que atraviesa la región y el empoderamiento de los jóvenes para crear agentes de cambio entre las nuevas generaciones ¿Cuáles son los principales objetivos de esta iniciativa? Lo que se busca es unir y articular a diferentes actores de la sociedad frente esta problemática. Nestlé es el impulsor, pero queremos que haya muchas otras empresas que se unan, sin importar que sean competencia, porque finalmente lo que importa es que los jóvenes puedan mejorar su empleabilidad dentro del sector privado. Luego tenemos a la academia, porque queremos que los jóvenes tengan una mejor formación para el mercado laboral y por lo tanto hay que incidir en el currículo de las universidades, de las escuelas técnicas, etc. Además de las autoridades gubernamentales, hay otras entidades invitadas, varias ONG, con las que buscamos generar un efecto de bola de nieve y así haya más actores participando de forma más activa. El objetivo también es dar la voz a los jóvenes, facilitar un espacio para que los jóvenes digan lo que necesitan, con qué realidad se encuentran, cuáles son los obstáculos a los que se enfrentan y así podamos mejorar su empleabilidad. ¿Qué respuesta han obtenido desde el sector público y gubernamental? Al principio eran un poco reticentes, pero entre el primer y segundo año vieron que la cosa iba en serio y que era algo transparente. Las autoridades se han subido también a la Iniciativa y para llegar a ese nivel debes tener mucha credibilidad, mucha confianza. Ellos saben por qué lo hacemos, saben que lo hacemos de forma transparente y gracias a eso la iniciativa está funcionando muy bien y nos ayuda a conectar con las autoridades sin que sea, necesariamente, para resolver problemas, aportamos también soluciones que deben de trabajarse de manera conjunta con todos los actores ya mencionados. Los jóvenes salen mucho más fácilmente insertables en el mercado laboral que cuando salen del colegio o de una universidad. La educación dual, por ejemplo, los jóvenes estudian y trabajan así que cuando acaban su preparación probablemente llevan tres o cuatro años trabajando y no se sorprenden con el mundo laboral. Cuando hablas con las empresas que tienen este sistema, ves que el índice de éxito en la contratación es casi del 100%, porque conoces al joven y si durante el tiempo que ha estado en tu empresa te ha gustado, lo contratas. Hay un beneficio para cada uno de los actores, primero para los jóvenes, para las empresas, para el Estado y para la sociedad: un joven que ya no estudia y tampoco trabaja es un problema y es un riesgo social. Mencionaste también la participación de la academia ¿Qué rol juega en esta iniciativa? Uno de los grandes problemas en el sector privado es que muchas veces buscamos perfiles que no encontramos, porque las universidades preparan a los jóvenes como hace treinta años. Mientras que tú necesitas un perfil más digital, más flexible, que pueda trabajar de manera virtual, que no necesita un jefe todo el día y las universidades no lo estaban proveyendo. Parte de la Iniciativa por los Jóvenes de Nestlé es influir en las universidades para mostrarles que tienen que cambiar el currículo, cambiar alguna de estas asignaturas teóricas y poner más horas de práctica o, por ejemplo, más soft skills: cómo trabajar en equipo, cómo trabajar virtualmente, cómo manejar una reunión híbrida, etc. n 10 REVISTA ANDA